El mantenimiento de las piscina puede ser una tarea algo pesada, pero no tiene porque ser un problema. Puedes leer nuestro artículo con importantes consejos para mantener tu piscina de manera perfecta.

Por fin se acerca el verano y, además de la playa, hay quienes tienen la suerte de poder disfrutar de algún que otro chapuzón en su piscina. Pero para que esta situación no se transforme en una mala experiencia, es importante limpiar y llevar a cabo un mantenimiento de la piscina, tanto antes como durante y después de su uso. Si no quieres que este año el verano te pille por sorpresa y tu piscina se convierta en un medio ideal para bacterias, hongos y otros microorganismos, toma nota de nuestros consejos para mantener la piscina limpia. ¡Vamos allá!

1. Mantén la piscina cubierta cuando vayas a estar mucho tiempo sin usarla

Nuestro primer consejo para que poner la piscina a punto no te lleve demasiado tiempo y esfuerzo es mantenerla cubierta durante los meses de otoño e invierno. De esta forma, evitarás que el agua esté demasiado sucia y hasta verdosa o enturbiada cuando vayas a volver a bañarte en los meses de calor.

2. Cepilla las paredes y el suelo de la piscina

En primer lugar, ayúdate de una pala con una malla para eliminar del agua todas las hojas e insectos muertos. Después, asegúrate de que no haya nada en el fondo de la piscina y, si lo hubiera, también tendrás que retirarlo. A continuación, cepilla las paredes y el suelo de la piscina haciendo bastante presión y siempre arrastrando hacia ti para eliminar la suciedad.

3. Aspira el fondo de la piscina

Lo más recomendable es contar con un limpiafondos automático, que trabajará solo y te ahorrará mucho tiempo. No obstante, también puedes hacerlo con un limpiafondos manual. Si optas por este último, necesitarás una manguera, un mango telescópico y un limpiafondos de ruedas móviles o fijas.

En primer lugar, arma el limpiafondos y conecta la manguera a la boquilla del aspirado. Después, introduce primero el limpiafondos y, poco a poco, toda la manguera en el agua, asegurándote de que esté pegada a la pared de la piscina.

A continuación, conecta la manguera a la boquilla del aspirado, activa el filtro de desagote y pasa el limpiafondos por toda la base de la piscina. Por último, vuelve a pasar el cepillo y echa un líquido antical y otro antialgas.

4. Limpia los accesorios y los filtros de la piscina

En esta ocasión, le toca al turno a la limpieza de los accesorios y los filtros de la piscina. Los accesorios que se pueden encontrar en una piscina son: los skimmers, los cestos, las rejillas, el canal rebosadero los focos y las boquillas, entre otros. Es importante que los filtros automáticos estén siempre limpios y que funcionen de cinco a siete horas diarias. Si tu piscina no cuenta con sistemas de filtración, puedes usar un canalizador de agua para realizar un correcto mantenimiento.

5. Comprueba los niveles de pH

Para asegurarnos de que la piscina está totalmente limpia, es importante llevar a cabo un test de los niveles de cloro y una prueba de hidrógeno del agua. Para ello, recuerda seguir las instrucciones del fabricante, ya que no todas las pruebas se realizan de la misma forma. Este paso es muy importante si quieres disfrutar de una piscina totalmente segura.

No te olvides del mantenimiento semanal de la piscina

Si llevas a cabo un mantenimiento semanal, te aseguramos que tu piscina estará siempre limpia y no tendrás que dedicarle tanto tiempo cuando te dispongas a limpiarla a fondo.

• Limpia las paredes y el limpiafondos de la piscina al menos una vez a la semana para evitar que se acumule cal y algas y añade antical y alguicidas cada 15 días.

• No dejes que se acumulen restos orgánicos de ningún tipo, como hojas o insectos, y limpia bien los skimmers y los filtros.

• Añade la dosis recomendada de cloro cada semana para que el agua esté bien limpia y desinfectada.